Reclamamos al Gobierno autonómico medidas eficaces para combatir el abandono educativo temprano en el Archipiélago, que según la última Encuesta de Población Activa (EPA), referente al último trimestre del año pasado, se sitúa en el 20,8%. Como sindicato con más representación en la enseñanza pública no universitaria de las Islas alertamos de que este indicador, uno de los más relevantes cuando se habla de educación, aumentó tres puntos entre 2017 (17,5%) y 2018 (20,9%) y se ha mantenido prácticamente invariable a lo largo de 2019, lo que evidencia un "peligroso" cambio de tendencia con respecto al comportamiento de esta tasa durante la crisis.
Recordamos que la reducción del abandono educativo temprano tuvo lugar durante la etapa de mayores dificultades económicas. Entre 2007 y 2017 esta tasa pasó del 36,4% -el máximo histórico en los registros del Ministerio de Educación- al 17,5%. Es decir, descendió algo más de 15 puntos. Uno de los factores que explica este retroceso es que dos sectores clave -Construcción y Servicios- dejaron de ofrecer salida a miles de chicos que preferían trabajar en lugar de estudiar. Sin embargo, cuando llegó la mejoría económica, el avance se detuvo.
En la actualidad, el Archipiélago está entre las cuatro comunidades con peores datos y la diferencia con respecto a otros territorios es alarmante. Destaca, por ejemplo, el hecho de que Canarias tenga tres veces más abandono temprano que País Vasco (20,8 frente a 6,7%), que es el territorio que presenta mejores datos.
En este contexto, subrayamos que la inversión para enseñanza fijada en la Ley Canaria de Educación -al menos el 5% del PIB en 2022- está lejos de cumplirse. El incremento que plantea la ley permitiría, a nuestro juicio, aumentar las plantillas docentes, que están por debajo de la media estatal, y poner en marcha programas específicos para atender esta realidad.
Aplaudimos la petición del presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, que esta semana propuso en el pleno parlamentario que el Consejo Escolar de Canarias (CEC) elabore un estudio para analizar este indicador teniendo en cuenta diferentes variables (situación socioeconómica, origen del alumnado, ámbito geográfico…). No obstante, señalamos que ya existen medidas que se pueden impulsar, como, por ejemplo, la reorientación de la Formación Profesional Básica (FPB), la reducción de las ratios alumno-profesor o el refuerzo de los programas de apoyo con educadores sociales en los centros.
En el caso de la FP Básica, consideramos prioritario que no se obligue a los docentes a impartir estas enseñanzas, sino que estas plazas se oferten como comisiones de servicios, de manera que acaben ocupadas por el profesorado más preparado para ello.
El abandono escolar temprano representa el porcentaje de población de 18 a 24 años que no ha completado el nivel de Educación Secundaria y no sigue ningún tipo de educación-formación. La Estrategia Europa 2020 estableció entre sus objetivos reducir el abandono escolar temprano a tasas por debajo del 10% en la UE y del 15% en España. En la actualidad, España (17,3%) está a la cabeza de los países europeos, lo que convierte a Canarias en uno de los territorios con peores registros del continente.
TOTAL.- 17,3%