Denunciamos el juego político que se está haciendo con la Educación. En este momento se trata del retorno de la jornada lectiva de Secundaria a las 18 horas lectivas. El Real Decreto de 2012 subió la carga horaria lectiva de este profesorado a 20 horas, con la crítica de toda la comunidad educativa. Ahora, el actual Gobierno del Estado aprueba dejar en las manos de las distintas comunidades autónomas esta decisión, pero sin dotar presupuestariamente la norma. Es decir, tenemos comunidades autónomas en las que sus gobiernos han decidido retornar a las 18 horas, otras a las 19 y otras continuar con las actuales 20 horas. En este último caso se encuentra Canarias que, pudiendo asumirlo de forma directa, lo ha condicionado en sus presupuestos a la autorización de gasto del superávit (cuestión que no ha sido autorizada aún). Como dice el refrán: "entre todos la mataron y ella solita se murió". ¿Cómo a estas alturas todavía no se retorna a las 18 horas lectivas en Secundaria y se abre la puerta a las 23 para maestros por un juego partidista?.
Con esta tomadura de pelo al profesorado, lo único que se consigue es debilitar las bases fundamentales de una negociación colectiva, que sólo puede prosperar a partir de la lealtad recíproca entre las partes y la confianza que sus representantes generan en las mesas: sin ambos requisitos, resulta imposible alcanzar acuerdos de ninguna clase, salvo que se pretenda tomar el pelo al profesorado con apariciones sonrientes en los medios de comunicación y la firma de unos documentos muy poco fiables.
Por el contrario, como ejemplo de labor sindical bien hecha, y también de seriedad en los compromisos adquiridos y firmeza en el cumplimiento de lo pactado por parte de una administración responsable, ponemos en valor el reciente Acuerdo para la Mejora del Marco Retributivo del Profesorado en Canarias, que ha permitido a todo el personal docente no universitario cobrar su complemento por formación (sexenios) y otros complementos retributivos con efectos del día 1 de enero de 2018.
Por último, queremos destacar, finalmente, que nuestros políticos, sin entrar en las ideologías que les mueven, deben actuar con responsabilidad ante las demandas de la comunidad educativa. A pesar de ello, ya hemos solicitado a las distintas fuerzas políticas, un último esfuerzo tanto en Canarias como en el Estado para lograr, al menos, un acuerdo que permita liberar las partidas presupuestarias necesarias para hacer frente al crecimiento de las plantillas que se producirá en septiembre con la reducción del horario lectivo del profesorado, tanto en Secundaria y enseñanzas asimiladas, hasta las 18 horas lectivas, como en Infantil-Primaria, donde se debe fijar un máximo de 23 horas semanales”.