ANPE Canarias considera muy desafortunados los comentarios realizados por Ana Oramas sobre el grado de conocimiento de la cultura e identidad canarias por parte del profesorado de las Islas. Son unas manifestaciones injustas que no se ajustan en absoluto a la realidad y son rechazables tanto en el fondo como en la forma, viniendo, además, de la vicepresidenta primera del Parlamento de Canarias.
Es una realidad que existen determinadas carencias formativas en el alumnado en diferentes materias y, de hecho, lo hemos venido advirtiendo expresamente; la última vez, muy recientemente, con ocasión de la publicación del último informe PISA. Pero es una cuestión que en ningún caso se puede cargar sobre los hombros del profesorado, que no dispone de los recursos necesarios para afrontarla: deben tomarse medidas y aportarse medios desde la Administración. La reducción de ratios para prestar una atención más individualizada al alumnado debe ser, sin duda, una de ellas.
En todo caso, tenemos que subrayar que sí existen aprendizajes canarios en la enseñanza de las Islas, decididos en su momento por la propia Comunidad Autónoma, y que forman parte, además, de la prueba de la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU). En los currículos de todas las etapas, desde infantil a Bachillerato, se establece la introducción transversal en las programaciones de aprendizajes sobre el conocimiento, la valoración y la conservación del patrimonio cultural, histórico, natural, social y lingüístico de Canarias, y, como no puede ser de otra forma, el profesorado lo está llevando a cabo.
Desde ANPE entendemos que los docentes y las docentes de Canarias se merecen una rectificación por parte de Oramas. Cuando estamos hablando, también desde la propia Administración, de la necesidad de poner en valor la labor del profesorado, declaraciones como estas no ayudan.
