ANPE Canarias exige al Gobierno que destine fondos europeos a compensar el déficit de los presupuestos educativos


29 Dic, 2021

ANPE Canarias exige al Gobierno que destine fondos europeos a compensar el déficit de los presupuestos educativos de 2022. La Consejería debe abordar con determinación en 2022 los principales problemas que arrastra la educación en el Archipiélago, entre ellos, el necesario incremento de la inversión en el sistema público canario de enseñanza en cuantía suficiente como para cumplir con la ley canaria de educación en 2022.

Las cifras aprobadas en la ley de presupuestos de la Comunidad Autónoma no permiten alcanzar el mínimo establecido en la ley canaria, que fija que en 2022 se debe invertir al menos el 5% en educación en el Archipiélago. Por ello, instamos a la Administración a paliar este déficit con la llegada de los fondos europeos.

Además, para ANPE es fundamental tener en cuenta también otros indicadores, como la inversión por estudiante. Solo con una financiación adecuada que atienda a estos y a otros factores, Canarias podrá avanzar y abandonar el vagón de cola educativo en el que, curso tras curso, nos sitúan la mayoría de índices, como el de abandono educativo temprano o la tasa de repetición.

Asimismo, reclamamos la puesta en marcha de un plan de rebaja de las ratios de estudiantes por docente en todos los niveles, la estabilización -con la indispensable garantía jurídica- de los docentes interinos y la ampliación y mejora de la red de infraestructuras educativas, entre otras medidas.

Consideramos prioritario reducir las ratios en infantil y primaria y consolidar el descenso ya aplicado en secundaria, bachillerato y FP. Para ello, reclamamos a la Consejería que acuerde cuanto antes con la representación del profesorado un plan plurianual de rebaja de las ratios que lleve aparejada la correspondiente ficha financiera. Dotar de más docentes a los centros implica mejorar la calidad de la enseñanza, la atención a la diversidad y, consecuentemente, los resultados educativos y las oportunidades de las nuevas generaciones. 

Una de las lecciones que nos deja la crisis sanitaria es la utilidad de la reducción de las ratios. Es algo que ya sabíamos y, de hecho, venimos reivindicando, pero se ha visto confirmado con el descenso aplicado en secundaria. Se ha notado una mejora del clima en las aulas, el profesorado ha podido desarrollar su labor de manera más adecuada y el alumnado está encontrando mejores condiciones para formarse. El siguiente paso debe ser negociar, redactar y poner en marcha un plan plurianual que extienda la medida en el conjunto de la enseñanza no universitaria.

Otra de nuestras reivindicaciones centrales para 2022 es que se acabe con la inestabilidad de miles de docentes interinos. Para ello, exigimos que se trabaje en dos vías fundamentales para dotar de más seguridad a todos estos profesionales. En primer lugar, la Consejería de Educación tiene que constituir y publicar las nuevas listas de interinos según los criterios que establece el nuevo sistema de ordenación aprobado este año. Y, en segundo lugar, Canarias ha de trabajar con el Ministerio en la adaptación de la nueva ley de estabilización nacional al ámbito educativo, pero siempre dotando al proceso de las garantías jurídicas indispensables para proteger al colectivo. 

Por otro lado, no nos olvidamos tampoco del déficit en materia de infraestructuras y pide la elaboración de un plan de infraestructuras educativas que permita contar con instalaciones dignas y adecuadas para atender al alumnado de todas las zonas de las Islas, a través de la renovación de las existentes, de su sustitución o de la construcción de otras nuevas, en función de las necesidades. Muchas infraestructuras han quedado obsoletas o resultan insuficientes para cubrir la demanda educativa, por lo que el sindicato considera indispensable una planificación que permita la ejecución, en el plazo más breve posible, de las obras que precisa el sistema público canario de enseñanza.

Además de estos asuntos, hay muchas otras asignaturas pendientes que hay que afrontar, como el establecimiento de las 23 horas lectivas para Cuerpo de Maestros, la creación de un estatuto de la función pública docente o la digitalización de la enseñanza pública aprovechando los fondos europeos, sin olvidar, por supuesto, la dotación de recursos suficientes para hacer frente a las necesidades educativas de la isla de La Palma derivadas de la erupción volcánica, ahora que por fin se ha dado esta por finalizada.