En el borrador que nos ha hecho llegar la Consejería de Educación a los sindicatos de la resolución por la que dictan instrucciones de organización y funcionamiento dirigidas a los centros docentes públicos no universitarios de la Comunidad Autónoma de Canarias para el curso 2024-2025 se vuelve a dejar fuera la posibilidad de que los equipos educativos celebren reuniones a distancia.
Este documento era el adecuado para permitir expresamente la modalidad telemática de las reuniones de los equipos docentes, especialmente de las evaluaciones, pero, inexplicablemente, la Consejería vuelve a hacer oídos sordos a una de las reivindicaciones más insistentes del conjunto del profesorado.
La cuestión es especialmente grave si tenemos en cuenta que en el borrador sí se permite celebrar de forma online la sesión de evaluación inicial, con el objeto de facilitar la asistencia de los tutores y las tutoras del curso anterior. Esto desmonta el argumento utilizado hasta ahora por la Consejería para no autorizar esta modalidad, que era la afección a la confidencialidad, integridad, trazabilidad y autenticidad de la información que se maneja en las reuniones de los equipos docentes. Ahora desaparece este supuesto problema (se solventa con las medidas ya establecidas para las sesiones a distancia de otros órganos colegiados –claustros, consejos escolares y consejos sociales–); sin embargo, ya sin justificación alguna, se sigue vetando la posibilidad de que los equipos docentes se reúnan telemáticamente si así lo decide el claustro correspondiente.
Desde ANPE presentamos hace unos meses un recurso administrativo contra la norma publicada por la Consejería para regular la celebración online de las sesiones de los claustros, consejos escolares y consejos sociales, precisamente por excluir las reuniones de los equipos docentes. Ante la negativa de la Administración a rectificar, llevamos la norma a la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Canarias. No obstante, confiábamos en que para el próximo curso la Consejería entrara en razón, pero vemos que, al menos de momento, no ha sido así.
Sinceramente, no encontramos ninguna razón para este empeño. Es una reivindicación generalizada del profesorado; facilitaría la organización de los equipos educativos y, en particular, las evaluaciones; no supone ningún coste para la Administración; y está plenamente amparada por la legislación.
Seguiremos insistiendo por las vías que sean necesarias hasta que las reuniones online de los equipos docentes sean una realidad. La Consejería está a tiempo de rectificar, dado que se trata aún de un borrador que ha de abordarse en mesa técnica y, posteriormente, en mesa sectorial, donde exigiremos que se modifique.